La facilidad que hay hoy en día para acceder al alquiler de carpas en Cantabria no existía en los comienzos del uso de la carpa.

Estas construcciones están construidas con una arquitectura tensada y textil. Son estructuras ligeras y tensadas, fáciles de transportar a cualquier parte.

En épocas remotas, los primeros poblados trashumantes formaban las viviendas con pieles de animales que cazaban y se sostenían por la tensión de las cuerdas de fibras naturales. Las personas de esa era no hubieran imaginado que en tiempos futuros se podría ir a una tienda para acceder al servicio de alquiler de carpas en Cantabria.

En el siglo XIX, hubo un auge en la arquitectura textil, pero hasta mediados del siglo XX no alcanzó su mayor desarrollo. En el año 1950 comenzó a evolucionar en el uso arquitectónico de estructuras más grandes unidas con elementos tensados. Este crecimiento también llegó gracias a revolución en la industria textil, pues se fabricaban materiales más duraderos y resistentes para crear las carpas.

En 1972 se presentó, en la sede de las Olimpiadas de Múnich, el primer proyecto que posiblemente hizo famosa esta arquitectura de estructuras tensadas. El progreso y evolución de las estructuras fabricadas con este tipo de arquitectura ha almacenado muchas historias inéditas. Entre ellas está la que ocurrió en la ciudad de Mineápolis en el año 2010, colapsó porque hubo una carga excesiva de nieve.

En la actualidad, el uso de carpas está muy normalizado y las podrás observar en muchos lugares, como en estadios de fútbol, en grandes eventos deportivos, circos, y muchos espacios de celebración que necesiten una cubierta para llevarse a cabo. En las bodas y ferias son muy populares y prácticas.

En Carpas Villoria valoramos el progreso de la arquitectura textil y la evolución de los materiales textiles. No dudes en contactar con nosotros.